Días así, con un viento fuerte que corre en las calles, que atraviesa las ventanas, me ponen los sentimientos a flor de piel, siento un remolino de sentimientos que me provocan ganas de llorar y reír a la vez.
Siento que puedo volar, que puedo ser yo sin reprimir ningún sentimiento, y es que mi vida se basa tanto en eso, en reprimir, en no saber decir, no saber expresar, en tener pavor a como reacciono si hablo de lo que me pasa, me da miedo llorar, vergüenza. Pero, sin embargo, me gusta escribirlo, tener a un artista como es el Flaco Spinetta de fondo, que me haga sentir satisfecha de cada partecita de mi alma.
Escribir es mi manera de entenderme, de aclarar mis ideas, de saber lo que quiero, lo que puedo lograr si me lo propongo.
Disfruto mucho estas noches donde el viento me envuelve en él mismo y tener en mano un papel y lapicera.
Poder conectarse con uno mismo, quererse, y no menospreciarse es algo único, pocas cosas te hacen sentir TAN BIEN como eso; agradezco al viento y al otoño que comienza en minutos por estas noches que estan por venir , ojalá fueran eternas. ♥