Fue hace poco, cuando mi
triste y corrompida alma iba caminando por las calles de la ciudad, una
calle vacía y gris en la que solo se escuchaba el susurro del viento
que la recorría, mientras suavemente movía las hojas de los pocos
arboles que se encontraban a mi alrededor.Mi mente se encontraba
completamente hundida en mis pensamientos, era como si estuviese separada
de mi cuerpo aunque este siguiera funcionando con completa normalidad,
no era la primera ves que sucedía, y seguramente no era el único al que
le sucedía.
De repente, como un haz de luz rompiendo la
infinita oscuridad de la noche, una pregunta vino a mi mente -¿Cual es
mi razón para vivir?- -¿Acaso tengo una, o tal vez la perdí hace tiempo?
Quizás....jamas pude tener algo tan valioso como una razón para estar
vivo.- Me cuestione eso durante varios minutos, nunca supe por que esa
pregunta había llegado a mi mente, pero allí estaba, torturandome y
desesperandome para que encontrara una respuesta a su incógnita.Y aunque
lo intentara, no pude encontrarla.
En ese entonces fue
cuando sentí que mi alma regresaba a mi cuerpo, y mi mente a la
realidad.La razón por aquel abrupto regreso estaba delante de mis ojos,
un hombre de edad avanzada y completamente vestido de blanco se
encontraba a pocos metros delante de mi, de perfil, pero por alguna
razón sabia que el me observaba. -¿Quien es usted? Dije en voz alta
-Quien o que soy no es importante, se que hay una pregunta en tu mente
que te tortura y te enloquece, y se que necesitas una respuesta.- Me
quede en silencio ante sus imponentes palabras -Dime amigo mio, tu que
te atreves a cuestionar la vida, en ves de apreciarla..De verdad podrías
llegar a la conclusión de que ¿No hay razón alguna para vivir?- -Si la
hay, yo no la tengo.- respondí sin dudar, a lo que enseguida el volvió a
contestar -¿Acaso no ves que la respuesta a tu pregunta, esta en lo que
cuestionas? ¿Acaso vivir no es suficiente razón para ti? ¿Cuestionate
ahora, por que estas vivo, si según tu no tienes ninguna razón? ¿Sera
por que la vida en si, es tan maravillosa que ni siquiera necesita una
razón para existir?....-
Me quede asombrado ante tales
palabras, y al terminar, aquel misterioso y sabio hombre giro hacia mi y
camino hasta pasarme por al lado -Vive hasta que ya no puedas mas, y si
al final de tu camino encuentras tu razón, es por que has vivido bien,
amigo mio.- Esas, fueron sus ultimas palabras -Hasta nuestro próximo
encuentro.- Por mi parte yo seguí mi propio camino, jurandome para
siempre, que no volvería a cuestionar mi vida, ni ninguna otra, nunca
jamas.
''Vive, y continua viviendo, porque si esa no es suficiente razón para ti, amigo mio, ya estas muerto.''